SOLIDARIDAD GENÉTICA
- SELLO QUE DISTINGUE Y PONE EN ALTO EL NOMBRE DE MÉXICO
Nuestro pueblo se caracteriza por ser solidario en tiempos de crisis, lo traemos grabado en los genes, así lo hemos demostrado una y otra vez, en cada sismo, huracán, inundación o cuanto trance de carácter social o natural ha golpeado el suelo mexicano. Nos volcamos a prestar ayuda, a veces dejando de lado nuestra propia seguridad o comodidad.
Tras el terremoto del pasado 19 de septiembre, fecha doblemente trágica, la sociedad civil ha buscado la manera de estar hombro con hombro con quienes sufren, con quienes lo han perdido todo, desde sus pertenencias hasta un ser querido. Con palos, picos, martillos o a mano limpia, quitan y acarrean escombro; cadenas humanas eternas muestran su compromiso y entrega; médicos y enfermeras donan su tiempo y conocimiento; amas de casa preparan comida y café para quienes no se han separado del objetivo de encontrar a alguien entre los edificios derrumbados; jóvenes que aportan entusiasmo y fuerza, enfatizando el espíritu de solidaridad que se respira en cada rincón de este país.
Albergues, donaciones de ropa, comida, casas de campaña, herramientas, cobijas, acogiendo a los desposeídos, compartiendo su wifi, ofreciendo ser contacto entre familiares que les es imposible comunicarse, como sea, lo que sea, pero ayudar es la premisa.
De este modo, desde esta capital, jóvenes entusiastas convocaron, organizaron la solicitud de víveres, medicamentos, ropa, agua, artículos de aseo y construcción; la empacaron, etiquetaron y acarrearon para que la ayuda llegara, en este caso particular, a la población afectada del estado de Morelos.
Gracias por su entrega, gracias por su dedicación, gracias, gracias, gracias a todos los que aportaron su granito de arena y una vez más, demostramos que Unidos… Somos Invencibles.
